Tiempo de Ocio Ceuta

El portavoz del Gobierno, Emilio Carreira, ha rechazado esta mañana en el debate sobre del ‘Estado de la Ciudad’ la propuesta de Caballas. Los localistas están alarmados por la xenofobia que está creciendo en la ciudad, y quieren que el Gobierno impulse “una movilización pedagógica en defensa de los principios y valores democráticos, y de la ‘Declaración Universal de los Derechos Humanos’ para combatir con determinación hasta erradicar todo tipo de comportamiento racista o xenófobo”.

Para Juan Luis Aróstegui, el portavoz de Caballas en esta ocasión, es importante de vez en cuando, “dejar por un momento a un lado el dinero y los ladrillos” y “hablar de sentimientos, valores y principios que de manera preocupante se están debilitando y devaluando”.

El localista dijo que está preocupado por el “vendaval de racismo y xenofobia” que actualmente está presente en los EEUU y Europa, donde hay una posibilidad “que en Francia haya un presidente fascista”. No le gusta porque “hace tiempo buscábamos maneras de construir puentes, pero ahora ya solo queremos construir muros” entre países.

Pero sobre todo lo más inquietante es que esta ola de xenofobia “está pasando aquí también y nosotros no somos solo espectadores. Hemos visto un rebrote de xenofobia y racismo, una muchedumbre enardecida por las calles diciendo “más policías, menos inmigrantes, fuera los MENAs”. Eso no era una gamberrada, sino un signo de algo que está pasando. Un signo que cada vez hay más conductas y conciencias racistas. Y esto no es un problema menor, sobre todo en una ciudad como la nuestra”, ha explicado Aróstegui. “Este fenómeno, aún en estado incipiente, supone una muy seria amenaza para nuestra ciudad, que no puede resistir una expansión de las conciencias o conductas racistas y xenófobas sin riesgo de desmoronamiento si las instituciones representativas no defendemos de manera activa y beligerante los principios democráticos”.

Por eso Caballas piensa que la idea que los problemas de Ceuta son culpa de los “extraños”, es una corriente “peligrosa” que “debe ser combatida por todos los medios posibles y por todo el mundo: no solo políticos, sino todos los ciudadanos y medios de comunicación también”.

La retórica de Aróstegui, sin embargo, no funciono con el portavoz del PP, Emilio Carreira. En una intervención muy corta, sencillamente dijo que él no cree “que Ceuta es una ciudad que tenga el riesgo, porque los caballas son gente buena –no todos, claro, son buenos– pero la mayoría sí que lo es. Lo hemos visto en playa Benítez, donde los ciudadanos dieron ropa a los subsaharianos. Ceuta es una ciudad solidaria. No tenemos mucho, pero si tenemos algo que da un valor añadido a Ceuta: sabemos convivir”. Además, Carreira piensa que el argumento de Aróstegui es peligroso porque “califica de rojos a quienes se citan para defender a los inmigrantes o de fachas a quienes lo hacen con otra motivación”.