¿Una década de igualdad?
La Ley Orgánica 3/2007 para la Igualdad efectiva entre mujeres y hombres, ha cumplido 10 años. Aunque como siempre suele ocurrir en nuestro país en materia de Bienestar e Igualdad, las respuestas suelen llegar mucho más tarde con respecto a otras sociedades.
Pese a todo, era la primera vez en que España, introducía en nuestro ordenamiento jurídico en forma de Ley Orgánica, conceptos tan relevantes como el de discriminación por razón de sexo o acoso sexual, así como se plasmaban las acciones positivas, la transversalidad y, toda una serie de principios, estrategias y acciones encaminadas a corregir y prevenir la desigualdad y discriminación entre hombres y mujeres.
Pero, ¿hemos alcanzado los objetivos de paridad marcados? ¿Tenemos las mismas oportunidades mujeres que hombres? ¿Se ha conseguido promover la tan anhelada y necesaria igualdad de género? ¿Se han cumplido realmente diez años de igualdad?
Las respuestas a estas cuestiones, lamentablemente no son las que todos y todas quisiéramos. Y si bien se han alcanzado grandes logros durante esta década, el camino que conduce a la igualdad plena, aún es, muy pedregoso y complicado.
Una ley tan importante como la Ley Orgánica 3/2007 para la igualdad efectiva entre mujeres y hombres, exige nuestra atención y trabajo continuo, especialmente, cuando observamos que la violencia de género se incrementa a un ritmo vertiginoso (sobre todo entre los más jóvenes), la brecha salarial sigue en auge o cuando los patrones de Igualdad retroceden o terminan cayendo en el olvido, la monotonía y la dejadez.
No podemos más que trabajar y luchar conjuntamente para poner remedio y freno a esta demostrable y patente manifestación de vulneración de derechos.
Y, sin embargo, lejos de actuar, hay quienes, como (ni más ni menos) la Directora del Centro Asesor de la Mujer (CAM) prefieren decir que la lucha por la igualdad es una utopía (indignante).
Creo que Ceuta (y así lo he comunicado, solicitado y propuesto en numerosas ocasiones) necesita potenciar y mejorar las políticas de Igualdad, pero, de manera real y no, de "boquilla" o en los tan conocidos e incluso ya normalizados discursos vacíos que pretenden vendernos los del Desgobierno, con el Sr. Vivas, a la cabeza.
¿Cómo es posible que la ciudad, no refuerce la lucha contra la discriminación laboral o la feminización de la pobreza?
Queda claro que para el ejecutivo local, las políticas de igualdad y el interés general no tienen cabida en la lista de prioridades que manejan. Pues Con voluntad política y respeto hacia la Ley, podríamos lograr fantásticos resultados para todos y todas.
La igualdad de género es primordial y ningún "buen" gobierno puede tolerar que las mujeres continuemos estando en un estado de desventaja respecto a los hombres por el simple hecho de ser mujeres.
A mi humilde entender, es necesario que la igualdad de derecho dé paso a la de los hechos. Todos los días se ha de luchar por la igualdad y, lógicamente, no se puede lograr sin adaptar las políticas de Igualdad a los nuevos retos que sufrimos.