Tiempo de Ocio Ceuta

El aragonés, Francisco Beltrán, que fue Alcalde de Fraga, a comienzos de este siglo pronunció las siguientes palabras: “Lamento profundamente que un número elevado de políticos hayan perdido la ética. Siento que no se hable de utopía… Estoy convencido de que en este siglo XXI se desarrollará un tipo de socialismo democrático capaz de incrementar la cultura y la educación, de erradicar la pobreza y de liberar la sociedad de la esclavitud materialista generada por este neoliberalismo salvaje en que vivimos actualmente”.

Susana Sumelzo, diputada por Zaragoza, hizo alusión a estas sublimes palabras en el acto del sábado, que protagonizó Pedro Sánchez en esta importante ciudad, donde una multitud de militantes acompañaron también a otros diputados y diputadas, como Mª Luz Martínez Seijo, Zaida Cantera, José Luis Ábalos y Odón Elorza. Muchos de ellos no pudieron acceder por razones de espacio y en gran número despidieron a Pedro en su salida a la calle.

En otras ocasiones he aludido a Susana Sumelzo. He podido comprobar su talante, actitud, compromiso y tenacidad. No me sorprenden sus alusiones a Francisco Beltrán. Es una socialista que encarna con su ejemplo, a mi modo de entender, la utopía y el pragmatismo socialista, que tanto necesita este país y el socialismo democrático que representa el PSOE. Me consta que en Aragón y en otros lugares de España, quienes la conocen solo tienen palabras de gratitud y aliento. Valoran sin rodeos su honestidad y dedicación a la causa socialista.

Esta causa tiene su origen en la necesidad de mayor justicia social y libertad, que históricamente ha perseguido el PSOE. Lo han demostrado con realidades, los Gobiernos de Felipe González y José Luis Rodríguez Zapatero, pero es necesario seguir construyéndola para el presente y el futuro de nuestro país. La utopía no puede ser olvidada o relegada a la indiferencia, pero esa utopía solo puede convertirse en realidad cuando se desarrolla con pragmatismo.

El país, la ciudadanía son los que indican por donde tiene que ir ese pragmatismo. A mi modo de ver, son los cauces democráticos y las necesidades contra la desigualdad, quienes deben orientar la brújula para que la sociedad compruebe y experimente las soluciones a sus necesidades. La ciudadanía tiene que apreciar las mejoras, y que vengan de una política representada por la honestidad, independencia y transparencia. Que de un modo tangible sea una realidad en el trabajo, la bolsa de la compra, en los colegios, la universidad, en todos los miembros de cada familia. Que se vea con certeza lo que se dice y se promete.

Como manifestaba Susana Sumelzo: “La sociedad nos reclama nuevos retos. Nos hemos separado de los ciudadanos. Son necesarias la credibilidad y la coherencia, algo que representa Pedro Sánchez. No es tiempo de mesas camillas sino de estar en la calle, en la universidad… Nuestro apellido común, lo que nos une, SOMOS SOCIALISTAS. Tenemos que llevarlo con orgullo y dignidad, cumpliendo con nuestra obligación y nuestra conciencia. Un camino en el que necesitamos a la militancia y a los ciudadanos de izquierdas, con esta ilusión imparable que se manifiesta en los actos donde participa Pedro Sánchez…”

“No es No es un Sí al cambio de regeneración que necesita nuestro país. Un Proyecto abierto a todos en un partido socialista autónomo, de izquierdas y creíble…Siendo socialistas en la España del siglo XXI, que significa tener raíces y principios que nos unen al pasado, presente y futuro, tener principios de libertad, igualdad y fraternidad, pues el socialismo democrático ahora es mucho más necesario, para cortar el paso del fascismo y el populismo…” Son palabras que manifestó Pedro Sánchez en el acto de Zaragoza.

Para ir concluyendo, extraigo también las siguientes consideraciones que expuso durante su intervención: “Respetamos a los restantes candidatos. Si ganamos exigiremos lealtad, si no, nos la exigiremos a nosotros mismos. Hemos padecido la cárcel, el exilio, la clandestinidad y siempre supimos resistir. Nuestros dirigentes tendrán dedicación exclusiva y limitación de mandatos. El PSOE es la fuerza que vertebra a España. Sería un error debilitar la relación con el PSC. Un partido socialista que refuerce la ecología y la educación y que no olvide la memoria histórica. Donde la militancia decida. Un PSOE que sea referente de los jóvenes, identificado como fuerza política del cambio”

Me parece fundamental que en este periodo de Primarias, todos los socialistas seamos un ejemplo, sin excepción. Estoy seguro que una inmensa mayoría lo piensa así, pues el país tiene que comprobar que se pueden dirimir las diferencias con seriedad, rigor, pero defendiéndolas con convicción y respeto, como dice Pedro Sánchez. Lo contrario sería un insulto y una traición a nuestros principios y a la ciudadanía. Hay que salir de este proceso con más unidad, y pensando que al día siguiente hay que continuar trabajando todos juntos por nuestro país.

Termino haciendo alusión a las palabras manifestadas al comienzo, de Francisco Beltrán: “Estoy convencido de que en este siglo XXI se desarrollará un tipo de socialismo democrático capaz de incrementar la cultura y la educación, de erradicar la pobreza y de liberar la sociedad de la esclavitud materialista…” Añado, donde la utopía y el pragmatismo socialista, sigan manteniendo la llama de la esperanza para España y el PSOE.