EL CORONEL MARCOS LLAGO PRESIDIÓ LOS ACTOS EN AUSENCIA DEL COMANDANTE GENERAL
La Jefatura de Sanidad (JSAN) de la COMGECEU celebró su Patrona
Este lunes día 27, de junio, en el Santuario de Nuestra Señora de África, tuvo lugar una misa solemne con motivo de la Patrona de la Sanidad militar, la Virgen del Perpetuo Socorro.
Este lunes día 27, de junio, en el Santuario de Nuestra Señora de África, tuvo lugar una misa solemne con motivo de la Patrona de la Sanidad militar, la Virgen del Perpetuo Socorro.
A continuación, tuvo lugar un breve acto institucional en el Salón de Trono de esta Comandancia, con la imposición de condecoraciones, y la alocución del Jefe de Sanidad de 
la COMGECEU, Coronel Briz Hidalgo, el cual manifestó que hoy era un día de recuerdo y de reencuentro.
De recuerdo para los fallecidos este año como el coronel Medico Gabriel Cruz Blasco, el doctor Antonio Millán los comandante enfermero Juan Baselga, Pedro Sánchez Mora y Maribel Carmona.
“El éxito es la suma de pequeños esfuerzos, repetidos día tras día”, esta frase de Robert Collier, se la dedico a todos los miembros del Cuerpo de Sanidad Militar (psicólogos, farmacéuticos, odontólogos, veterinarios, enfermeros y médicos).
A los enfermeros el Coronel, quiso destacarle por su trabajo, porque aparte de ser el pilar básico de la Sanidad Militar en las unidades, además ejercen como Jefes de Sanidad, “se comportan como nuestros ojos y nuestras manos en las unidades”, resalto el coronel Briz.
Esta festividad de Nuestra Señora del Perpetuo Socorro la celebra el personal de la JSAN 
de la COMGECEU, personal del Cuerpo Militar de Sanidad de las diferentes Unidades de la COMGECEU y personal de la Clínica Militar de Ceuta.
Al acto fue presidido por el coronel Marcos Llago, en ausencia del Comandante General, al que acompañaron todos los jefes de las unidades de la Plaza de Ceuta. Entre las autoridades civiles, cabe destacar la presencia del director territorial del Instituto Nacional de Gestión Sanitaria en Ceuta, el doctor Fernando Padilla y el presidente del Colegio de Médicos de Ceuta, doctor Enrique Roviralta, como también numerosos invitados civiles y militares.
