HERNÁNDEZ: “SI NO SE REFORMA LA LEY, SE EMPOBRECERÁ A GENERACIONES ENTERAS DE PENSIONISTAS”.
Hernández acusa al Gobierno de Rajoy de haberse "fundido" la hucha de la Seguridad Social
Hernández reprocha al Gobierno de Rajoy de haberse gastado la casi totalidad de los 65.000 millones de euros que heredó del Gobierno de Zapatero, y ha advertido del inminente agotamiento del Fondo de Reserva en el 2017.
El PSOE llevará a cabo la próxima semana una ofensiva parlamentaria conjunta de sus grupos en Congreso y Senado en defensa del sistema público de pensiones. El secretario general del PSOE de Ceuta, Manuel Hernández, ha valorado las iniciativas socialistas y ha manifestado que “tenemos que asegurar unas pensiones dignas para todos recuperando su poder adquisitivo, especialmente en las pensiones mínimas, y dar garantía de futuro al sistema público de pensiones”.
El socialista, que acusado al Gobierno de Rajoy de haberse “fundido” la hucha de la Seguridad Social, al haber gastado la casi totalidad de los 65.000 millones de euros que heredó del Gobierno de Zapatero, ha advertido del inminente agotamiento del Fondo de Reserva en el 2017. Por ello, subraya la “urgencia y necesidad” de alcanzar un acuerdo que “no será posible, si Rajoy se empeña en mantener la reforma de 2013 que condena a una subida de las pensiones del 0’25% anual, independientemente de lo que suceda con la inflación”.
Hernández hace especial hincapié en la necesidad de “tomar medidas ya ante el disparatado déficit anual de la Seguridad Social, y necesitamos reformar la Ley porque la inflación está en el 3% y, de mantenerse así, supondrá una pérdida de 2'75%, o sea, once veces la subida de las pensiones prevista para 2017. Si no se reforma la Ley, se empobrecerá a generaciones enteras de pensionistas”.
A partir de la llegada del PP al Gobierno, el Ejecutivo de Rajoy aprobó de forma unilateral la Ley 23/2013, que establecía un nuevo índice de actualización de pensiones, y que ha supuesto una merma importantísima de los ingresos y de la capacidad adquisitiva de los pensionistas; ligando el índice de revalorización anual de las pensiones a la salud de las arcas públicas, de manera que las pensiones solo suben si aumentan los ingresos del sistema por encima de la tasa de crecimiento del número de pensiones; factor que se movería entre unos valores situados entre un mínimo del 0,25% y un máximo del IPC +0,5%, afectando además a millones de trabajadores en cuanto a las bases de cálculo de sus pensiones por los años de desempleo o la reducción de salarios.
