CSI-F vuelve a reivindicar la falta de material de protección
Tras las graves situaciones vividas en el servicio realizado por la policía Local en servicio realizado relacionado con el desalojo y la demolición de una vivienda en la barriada Príncipe Alfonso, el CSI-F se ve en la obligación de denunciar que muchos de los agentes de la Policía Local que asistieron a dicho dispositivo eran los únicos miembros de cuerpos de cuerpos y fuerzas de seguridad que carecían de medios de protección como son los escudos y los cascos de protección.
Este hecho, fue denunciado por el CSI-F al Comité de Seguridad y Salud en su reunión del día 28 de octubre, no habiendo sido solventado con la premura que se necesita y habiendo puesto en peligro la vida de los agentes allí reclamados, los cuales, no se negaron a realizarlo aún a sabiendas que su integridad física corría peligro.
Asimismo, en dicha reunión del Comité de Seguridad y Salud se denunció la ausencia de extintores en los vehículos de la UPAC, el inexistente mantenimiento de extintores (o cumplimiento de caducidad de los mismos) del resto de vehículos y diversos materiales necesarios para el correcto desempeño de su labor como agentes de la autoridad. “Más escandaloso si cabe, el hecho de que alguna de las solicitudes las han reiterado en varias ocasiones y hace más de un año”, añade el sindicato.
Gracias a la denuncia del CSIF y tras la reunión mantenida por los delegados de prevención y miembros del comité de Seguridad y Salud con el actual Superintendente accidental de la Policía Local el día 30 de noviembre se acordó, crear un grupo de trabajo y seguimiento con motivo de establecer unas medidas correctoras de todas las necesidades vinculadas con riesgos laborales pero, expone el CESI-F que, “materiales de vital importancia como cascos de protección o escudos no pueden esperar a la buena fe y gestión ni del Jefe Accidental, ni del comité ni de nadie en particular. Es más, si no disponen del material necesario para realizar un servicio por ausencia de medios materiales, habría que buscar otra alternativa que no ponga la vida de los agentes en peligro”, concluye.
