ABANDONAN LAS FUERZAS ARMADAS A LOS 45 AÑOS
Revolución en la tropa: cientos de soldados y marinos, a juicio para ser fijos en el Ejército
El TSJ de Murcia da la razón a un grupo de militares ante el silencio administrativo, Defensa recurre al Supremo y cientos de funcionarios se organizan para interponer nuevas demandas
El TSJ de Murcia da la razón a un grupo de militares ante el silencio administrativo, Defensa recurre al Supremo y cientos de funcionarios se organizan para interponer nuevas demandas
Soldados españoles en Irak. (EFE)
Los militares de tropa y marinería terminan contrato con el Ejército cuando cumplen los 45 años. "No podemos tener un Ejército lleno de soldados de 50 años", argumentó la ministra María Dolores de Cospedal el pasado 20 de diciembre en la Comisión de Defensa del Congreso para justificar la continuidad de una normativa que la justicia está poniendo en entredicho. El Tribunal Superior de Justicia (TSJ) de Murcia lleva meses concediendo la consideración de personal fijo a militares de tropa y marinería que recurren por la vía administrativa y reciben el silencio por respuesta.
En la actualidad, según fuentes jurídicas, hay 16 procedimientos abiertos por este asunto en el alto tribunal autonómico. Todos ellos van a ser recurridos ante el Tribunal Supremo por la Abogacía del Estado en representación del Ministerio de Defensa, que considera que el TSJ de Murcia no entró a valorar el fondo de la cuestión sino únicamente los mencionados silencios administrativos, que a juicio del departamento dirigido por Cospedal han sido mal contabilizados. La Abogacía, explican fuentes de Defensa, prevé argumentar también en su recurso de casación que el TSJ de Madrid ha emitido sentencias que desestiman pretensiones similares a las planteadas en Murcia.
En paralelo a estas causas, cientos de militares de tropa y marinería se organizan para iniciar otra vía judicial alternativa que les lleve al mismo fin, el de convertirse en personal fijo del Ejército. En este saco se engloba tanto a soldados que a los 45 deben abandonar las Fuerzas Armadas como a los denominados militares de complemento, que solo pueden permanecer en la carrera castrense durante 18 años. Algunos de estos empleados públicos canalizarán sus demandas judiciales a través de un despacho de abogados. Otros se apoyarán en el bufete Osuna, que tiene experiencia en tramitar causas de miembros de las fuerzas de seguridad, como la de los 300 policías y guardias civiles heridos en acto de servicio que reclaman ser equiparados a víctimas del terrorismo a efectos de indeminzaciones.
Desde este este último bufete explican que el Tribunal de Justicia de la Unión Europea, aplicando una directiva comunitaria, ha prohibido hacer contratos temporales para amparar funciones permanentes. "No importa que una ley estatal ampare esta contratación temporal fraudulenta, aquí lo importante es el derecho del trabajador", argumenta Juan Carlos López, abogado que está aglutinando a los interesados y que prepara ya la demanda.
Actualmente las Fuerzas Armadas cuentan con 77.000 miembros de tropa y marinería sometidos a la normativa que les exige abandonar el Ejército a los 45 años si no han ascendido antes. A los seis años de ingresar, explican desde el Ministerio de Defensa, los soldados son sometidos a unas pruebas, que algunos superan y otros no. Los que siguen, continúan hasta la mencionada edad tope. Las mismas fuentes aseguran que, desde que cumplen 10 años en la carrera castrense, los soldados pueden ir accediendo a cursos que les permiten acceder al grado de oficial, al de suboficial o a la categoría de tropa permanente. Además, en las oposiciones de la Guardia Civil y de la Policía Nacional se reservan plazas para ellos y existen puestos de civiles en la Administración a los que pueden acceder con preferencia.
María Dolores de Cospedal, ministra de Defensa. (EFE)
El resto, continúan las mismas fuentes, deben abandonar las Fuerzas Armadas con el fin de que no haya soldados de edad avanzada. Según el Ministerio, los que pasan finalmente a la denominada reserva especial a los 45 años son apenas el 5% de los que empiezan. Éstos reciben una retribución de 7.500 euros anuales una vez que dejan atrás el Ejército por superar la mencionada edad límite.
En la intervención del pasado 20 de diciembre, Cospedal insistió en mantener el modelo y seguir "trabajando en materia de formación para que la desvinculación" de estos militares "sea un éxito". El diputado de Podemos Juan Antonio Delgado, por su parte, calificó de "purga" la medida que prevé expulsar del Ejército a los soldados que cumplan 45 años. "Les deja en una situación de precariedad social y sin expectativas laborales; no podemos dejar en la cuneta a quienes han hecho tanto por España", sentenció el congresista.
